La lingüística funcional sistémica tiene sus orígenes en la tradición estructural-funcional europea; su referente fundamental es John R. Firth (ver Recorrido histórico). Ha sido desarrollada por Michael Halliday y luego expandida y reformulada por numerosos discípulos, que se distribuyen en distintos continentes: Australia, diferentes países europeos y más recientemente americanos. La LSF es una teoría lingüística cuyos componentes son una propuesta gramatical, la gramática funcional sistémica y una teoría del género y del contexto.
La LSF es una teoría funcional porque está diseñada para dar cuenta de cómo se usa el lenguaje; este, a su vez, es funcional en tres sentidos distintos aunque estrechamente relacionados: en su interpretación de los textos, del sistema, y de los elementos de las estructuras lingüísticas. La lengua es un recurso para crear significados a través de sucesivas elecciones; En una dimensión más amplia, la idea de elección reaparece en la elaboración del concepto de registro, variedad lingüística condicionada por la situación o la actividad. La relación entre lenguaje y contexto es de interacción probabilística: los textos “realizan” una cantidad finita y determinada de dimensiones contextuales y, a su vez, los textos permiten identificar y reconstruir las condiciones contextuales. El énfasis en la idea de opción opone la teoría –caracterizada por Halliday como paradigmática- a los modelos formales o sintagmáticos, que interpretan las lenguas como listas de estructuras. La lengua se concibe como un sistema de estratos, que se ilustran como un sistema de capas sucesivas inclusivas, a saber: la fonología/grafología, la léxico-gramática, la semántica, el contexto de situación, el contexto de cultura y por último, como capa mayor, la ideología. Cada estrato es una red de sistemas en el que operan las funciones semánticas fundamentales: la experiencial, la interpersonal y la textual. El corazón de la gramática es el sistema de transitividad, que es el recurso para la interpretación y representación de la experiencia en forma de configuraciones de procesos, participantes y circunstancias. Como en todo enfoque funcionalista, los aspectos sociales y culturales son estratos explicativos de la teoría: el contexto de situación, conformado por las variables de campo (contenido experiencial), tenor (relación entre los participantes) y modo (el papel de la lengua en la comunicación), y el contexto cultural con su potencial semiótico. La versión clásica de la gramática funcional sistémica se encuentra en el libro de Michael Halliday (1994), en el que se incluyen además capítulos dedicados a la cohesión y a la metáfora gramatical; también conviene consultar Suzanne Eggins (1994), Christian Matthiessen (1995), James Martin, Christian Matthiessen y Clare Painter (1997). El libro Cohesión en inglés (1976), de Michael Halliday y Ruqaiya Hasan, tuvo un alto impacto en la orientación textualista de la LSF; el texto es, de acuerdo con esta posición, un objeto semántico, cuyas ligazones son los mecanismos cohesivos, que le otorgan textura. En los años recientes se han producido importantes desarrollos en la teoría del registro, los géneros, la teoría de la valoración (appraisal), con aplicaciones relevantes en marcos de enseñanza del inglés como lengua materna y como lengua extranjera. Sobre esos temas trabajan en la actualidad investigadores de la Escuela de Sydney (Australia) y de Gran Bretaña (por ejemplo: Martin y Rose, 2003; Martin y White, 2005; una presentación en castellano de la teoría del género y del registro ofrecen Eggins y Martin, 2000); otra línea de trabajo relevante es la que se dedica a las particularidades de la lengua científica (Halliday y Martin, 1993, Martin y Veel, 1998). Existen todavía pocos estudios para la lengua española, aunque se percibe una influencia creciente de esta teoría en España, Brasil, Chile y Argentina. Se pueden consultar distintos trabajos en español en la revista Signos de la Universidad Católica de Valparaíso, la RAL –Revista Argentina de Lingüística–, número 11-15, 1995-1999, y la RASAL, número 2, 2004 y 1, 2005).
El Congreso internacional de Lingüística Funcional Sistémica se lleva a cabo anualmente; recientemente se han comenzado a realizar Conferencias Regionales Latinoamericanas de Lingüística Sistémico Funcional, la primera de las cuales tuvo lugar en Mendoza, Argentina, en el mes de abril de 2004.